Apertura alcista en bolsas europeas y futuros estadounidenses que siguen el ritmo del buen cierre vivido el pasado viernes, cierre animado por la reducción de las perspectivas de inflación a largo plazo en EEUU y la posibilidad de que ante esto la Reserva Federal baje el ritmo de su endurecimiento monetario.
En fontanería de mercado, otro catalizador alcista pueden ser los rebalanceos de fin de semestre. JP Morgan considera que el reajuste de las carteras elevará las acciones estadounidenses otro 5% esta semana.
Además, el mercado está muy sobrevendido, los saldos de efectivo están en niveles récord y la reciente actividad de venta en corto del mercado ha alcanzado niveles no vistos desde 2008. Todos factores que invitan a continuación del rebote.
Sin embargo, a nivel económico siguen los problemas. De inflación estamos pasando a hablar cada vez más de recesión. Goldman Sachs estima ya en un 40% la probabilidad de depresión en la zona euro para el próximo año. En EEUU habla de un 50%. Y desde nuestro punto de vista, siguen siendo estimaciones muy optimistas.
Los rendimientos de los bonos también se han tomado un respiro, apuntando a esa posibilidad de recesión y es algo que sigue favoreciendo a las bolsas. Con todo esto, en TradingPRO vigilamos continuación en el rebote y marcamos posibilidad de inversión en DAX y Nasdaq.
En Asia, signo alcista hoy en los principales selectivos.
En Forex, el dólar abre la semana débil frente a las principales divisas.
En commodities, el petróleo recupera posiciones mientras los inversores se mantienen en guardia ante cualquier medida contra las exportaciones rusas de petróleo y gas que pudiera surgir de la reunión de los líderes del Grupo de los Siete (G7) en Alemania.
En criptomonedas, el sector se recupera de forma tímida. Bitcoin cotiza en los 21.000 dólares y el Ethereum en los 1.200. Mientras tanto, el criptoprestamista Celsius Network contrata a más asesores para prepararse para una posible quiebra
En la agenda macro, estaremos pendientes de los discursos que se esperan de Christine Lagarde e Isabel Schnabel, del BCE.