
ASML Holding, el gigante neerlandés de la litografía avanzada, ha presentado unos sólidos resultados trimestrales, confirmando su papel como piedra angular en la industria global de semiconductores. Sin embargo, tras el optimismo inicial, emergen señales de alerta relacionadas con su exposición al mercado chino y con el creciente interés europeo —incluido el español— por desarrollar capacidades propias en este sector estratégico.
Resultados sólidos, pero con sombra asiáticaDurante el tercer trimestre de 2025, ASML registró ventas netas de 7.500 millones de euros y un margen bruto del 51,6 %, cifras que superaron las expectativas del mercado. La compañía proyecta un crecimiento anual cercano al 15 %, apoyado en la expansión de la demanda global de chips destinados a inteligencia artificial y centros de datos. No obstante, la empresa ha advertido de una caída significativa de las ventas en China para 2026, un mercado que actualmente representa cerca de un tercio de sus ingresos por equipos nuevos. Las restricciones tecnológicas impuestas por Estados Unidos y la creciente fragmentación geopolítica amenazan con afectar el ritmo de pedidos en la región.
El contexto europeo y la carrera por la autonomía tecnológicaMientras ASML sigue siendo el líder indiscutible en sistemas de litografía EUV, Europa acelera su agenda de autonomía estratégica en semiconductores. España, en particular, está ganando presencia en áreas específicas de la cadena de valor. Startups como Wooptix, especializada en metrología óptica avanzada, y proyectos nacionales en Cataluña, Málaga o Extremadura dentro del PERTE Chip, demuestran el interés por posicionar al país como socio tecnológico más que como competidor directo. El desarrollo de materiales avanzados, como los diamantes sintéticos para uso semiconductor, apunta a fortalecer el ecosistema europeo sin replicar el modelo industrial de ASML. Por ahora, ninguna empresa española compite directamente con ASML, pero el impulso inversor europeo podría abrir oportunidades en segmentos complementarios de inspección, óptica y materiales de precisión.
Análisis técnico: consolidación tras los máximosEn el plano técnico, las acciones de ASML cotizan hoy entorno a los 874 euros por acción manteniéndose cerca de sus máximos históricos en 905,1, impulsadas por la euforia de la inteligencia artificial. El valor ha mostrado una tendencia alcista sostenida desde inicios de año, con soporte clave en torno a los 804 € y resistencia inmediata en la zona de 960€.

ASML continúa siendo una referencia tecnológica global, esencial para la fabricación de chips avanzados. Sin embargo, el peso de China en sus ingresos y la presión regulatoria internacional podrían marcar el rumbo de su crecimiento en 2026.
Mientras tanto, Europa —y España en particular— buscan ganar terreno en los segmentos que orbitan alrededor del coloso holandés. Más que una rivalidad directa, lo que se perfila es una red de innovación que podría, a medio plazo, diversificar el mapa tecnológico europeo.