Aunque muchos analistas atribuyen la reciente caída en los mercados bursátiles a las decisiones políticas del expresidente Donald Trump, existe un indicador técnico que lleva más de un siglo anticipando con precisión los ciclos del mercado: el precio del petróleo con un desfase de 10 años.
Según este modelo, una corrección significativa en la bolsa estaba prevista para el año 2025 desde hace tiempo.
Este patrón, que ha mostrado una alta efectividad desde la década de 1890, sugiere que el comportamiento actual del mercado no es tanto consecuencia de las acciones del gobierno o la Reserva Federal, sino parte de una tendencia más profunda y previsible.
Las políticas monetarias o fiscales pueden influir en la intensidad del ciclo, pero no cambian su dirección fundamental.
La relación entre petróleo y mercado bursátil
El modelo indica que los movimientos en el precio del crudo se reflejan aproximadamente una década después en índices como el Dow Jones Industrial Average (DJIA).
Aunque el desfase no siempre es exacto —puede variar unos meses—, la sincronización general se ha mantenido a lo largo de los años. No obstante, la magnitud de los movimientos bursátiles no siempre replica con exactitud las fluctuaciones del petróleo.
Es importante destacar que eventos externos inesperados, como guerras o pandemias, pueden alterar temporalmente esta correlación. Por ejemplo, el repunte del petróleo durante la Guerra del Golfo en 1990 no tuvo un eco claro en los mercados una década después. Del mismo modo, es poco probable que la caída del crudo durante la pandemia de COVID-19 en 2020 tenga un reflejo directo en 2030.
2025: El eco de la caída del petróleo entre 2014 y 2016
Lo que sí está ocurriendo ahora es un ajuste en los mercados bursátiles en respuesta a la fuerte caída del petróleo registrada entre 2014 y 2016. Este fenómeno, anticipado por el modelo de correlación a 10 años, se había retrasado debido al optimismo del mercado tras la elección de Trump. Las expectativas de una rápida recuperación impulsaron los índices hasta inicios de 2025. Sin embargo, ahora los mercados están ajustando su trayectoria, corrigiendo los excesos anteriores.
Conclusión
La corrección bursátil de 2025 parece más una confirmación de patrones históricos que una sorpresa causada por la coyuntura política. Comprender la relación a largo plazo entre el petróleo y los mercados financieros puede ser clave para anticiparse a futuras crisis económicas y tomar decisiones de inversión informadas.